Una sonrisa atractiva no sólo mejora la autoestima de las personas, sino que además es un claro signo de buena salud. Los dientes encimados y torcidos sin tratamiento ortodóncico pueden empeorar y son difíciles de limpiar y mantener sanos.
La ortodoncia se especializa en diagnosticar, prevenir y tratar las irregularidades dentales, maxilares y faciales, también llamados problemas de maloclusión (mala mordida). Con este tratamiento se disminuye la posibilidad de aparición de caries, la pérdida de dientes, enfermedades de la encías y hasta jaquecas crónicas o dolores de cuello derivados de una articulación de la mandíbula desalineada.
La ortodoncia es un tratamiento efectivo y que puede realizarse a cualquier edad obteniendo resultados estupendos
Tipos de Ortodoncia según cada necesidad
Brackets linguales
Placas alineadoras transparentes
Brackets estéticos
Brackets metálicos
– Recambio de los dientes de leche en forma temprana o tardía
– Dificultad para masticar o morder
– Dificultad en la respiración
– Dientes encimados, en mala posición o bloqueado
– Mandíbula que se desplaza o hace ruidos
– Dificultad al pronunciar las palabras
– Muerden torcido o los dientes de arriba y de abajo no se tocan
– Maxilares adelantados o retrasados
– Bruxismo o rechinamiento de los dientes
– Desbalance o asimetrías faciales
– Mentón exagerado o pequeño
El diagnóstico se realiza mediante el estudio de la historia clínica utilizando modelos tridimensionales y trazados computarizados a partir de radiografías y estudios fotográficos del perfil.
Luego se utilizan aparatos o brackets, que son diseñados específicamente de acuerdo al problema que se esté tratando. Pueden ser removibles o fijos (cementados), de metal, cerámicos o plásticos. Todos cumplen un mismo objetivo: ejercer una suave presión para mover los dientes a sus posiciones correctas.
La elección del especialista que realizará el tratamiento ortodóncico es un factor clave que no debe tomarse a la ligera. No solo los dientes se modifican, sino también la armonía que existe entre ellos con los labios y el rostro, lo que en ocasiones cambia la cara de la persona en forma permanente.
Depende de cada problema ortodóncico, no obstante la ortodoncia puede mejorar su sonrisa a cualquier edad. Se recomienda que la primera visita el ortodoncista sea alrededor de los 6 años, o antes si un problema ortodóncico es detectado por los padres, el odontólogo de la familia o el pediatra, como por ejemplo mordidas cruzadas. Esto debe llamarle la atención ya que a la ortodoncia se la asocia usualmente con la adolescencia. Algunos problemas pueden estar bloqueando el normal desarrollo de las estructuras.
Un examen temprano, le permite al especialista en ortodoncia determinar cómo y cuándo tratar un problema en un niño optimizando resultados, tiempo de tratamiento y dinero. Una intervención temprana aprovecha el crecimiento facial y la erupción dentaria para disminuir la severidad del problema. En muchos casos, el tratamiento temprano consigue resultados que serían inalcanzables una vez que la cara y los maxilares terminaron de crecer.
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